jueves, 29 de noviembre de 2012

Palacio Manzano - Casa De Rodríguez Del Manzano






Casa de Rodriguez del Manzano
Casa de Rodríguez del Manzano
Situada en la Plaza de la Libertad nos encontramos con la Casa de Rodríguez del Manzano de estilo gótico, construida entre el final del s. XV y principios del s. XVI para los marqueses de Ardales perteneciente al bando de San Benito.

Tiene una puerta Renacentista adintelada recuadrada por un alfiz y un centrado balcón de balaustrada castellana.

Fue propiedad de los marqueses de Ardales, que la cedieron al Obispado de Salamanca.
 
En 2005 fue cedida al Ayuntamiento para dependencias municipales con un edificio moderno en la trasera, en la c/ de Íscar Peyra. En el año 2008 acabó la reforma de ambos edificios, trasladándose a la casa el Organismo Autónomo de Gestión Económica y Recaudación (OAGER).
 
Esta casa forma parte de la historia de Salamanca debido al enfrentamiento de los Bandos de la ciudad.
 
Hacia la casa de María la Brava
Cuentan que en un enfrentamiento entre los Enríquez y los Manzano, éstos últimos mataron a los primeros tras un juego de pelota. Huyeron los Manzano a Portugal donde fueron perseguidos por la madre de los Enríquez, Doña María la Brava, acabando con sus vidas. Este hecho, evidentemente, generó más violencia y más combates, entre los dos bandos, hasta que intervino el padre Juan de Sahagún y consiguió apaciguar los ánimos y terminar guerra de los bandos.
 
Si uno entra por la c/ de Espoz y Mina, a la izquierda de esta casa, una calleja con un encanto especial, desemboca en la Plaza de los Bandos, a mano izquierda, haciendo esquina nos encontramos con la Casa de María la Brava.

lunes, 26 de noviembre de 2012

Casa de María la Brava



 
Casa de Doña María la Brava
Casa de Doña María la Brava
Situada en la Plaza de los Bandos nos encontramos con la Casa de María la Brava de estilo renacentista, construida en el año 1485 perteneciente al bando de Santo Tomé.

En el solar donde estuvo la verdadera casa de doña María Rodríguez de Monroy, edificaron sus descendientes otra hacia 1485, de la que queda tan sólo la fachada, ligeramente alterada por un balcón que se abrió posteriormente.

Tiene un amplio portalón de entrada con grandes dovelas de cuyos salmeres (primera piedra de un arco adintelado) nace un alfiz (moldura que rodea la parte exterior de un arco) que rodea los escudos, el balcón y la toza de piedra labrada de cardinas naturalistas que está sobre el balcón. Está decorado a todo lo largo por bolas, ornamentación muy usada en la época de Isabel la Católica.

El escudo principal está sobre el balcón es de los Enríquez de Sevilla. El de la izquierda lleva las armas de los Monroy, las mismas que pertenecieron a doña María y el de la derecha, las de los Maldonado.

Tiene la casa un amplio zaguán (entrada inmediata a la puerta de la calle) y una escalera no muy grande que corresponden a alteraciones hechas en el siglo XVII. Durante bastantes años del siglo XX la casa acogió las dependencias del Centro Farmacéutico Salmantino. Actualmente se remozó la casa para hacer un hotel pero no está abierto al público.
 
Casa de Doña María la Brava
Detalle del balcón y los escudos
No sé muy bien porqué, pero la historia de la señora de la casa siempre me ha encantado.
 
Las familias nobles de Salamanca estaban enfrentadas por el control de la ciudad en dos bandos, el de San Benito y el de Santo Tomé. Era el típico enfrentamiento violento, duro y cruel propio de la época.
 
Doña María, natural de Plasencia, casó con don Enrique Enríquez y a partir de ese momento residió en Salamanca en la casa que hemos descrito, integrándose por su pertenencia familiar al bando de Santo Tomé. Tuvo dos hijos, Luis y Pedro, los “Enríquez”. Enviudó pronto.
 
Ya crecidos los hijos, tomaron parte en las luchas contra los de San Benito. En una de esas refriegas, fueron muertos por los hermanos Gómez y Alonso, los Manzano, del Bando de San Benito, en el trascurso de un juego de pelota. Tras la muerte de los Enríquez, Los Manzano tomaron camino de Portugal para evitar lo inevitable.

Cuentan que Doña María no se encontraba en la ciudad cuando esto ocurrió a sus hijos, vino enseguida y tras el entierro y con el pretexto de llorarles partió a tierras segovianas con un séquito de veinte hombres. Una vez lejos de la ciudad, cuando ya nadie podía verles y habiéndose asegurado de que no les seguían, el séquito cambio su rumbo y se tomó el camino a Portugal, a una posada en Viseu, donde estaban los Manzano. Cruzó la frontera portuguesa, encontró a los asesinos de sus hijos, los mató, los decapitó y volvió, con las dos cabezas clavadas en sendas picas a modo de estandarte. Una vez aquí ordenó que las colgasen de los garfios de la puerta de su casa (en otras narraciones se dice que dejó las cabezas decapitadas sobre las tumbas de sus hijos con la mano siniestra para no manchar la diestra,  que la vida de un Enríquez con otra vida se paga). Desde entonces fue conocida como María "la Brava".
 
Este hecho, evidentemente,  generó más violencia y más combates, entre los dos bandos, hasta que intervino el padre Juan de Sahagún y consiguió apaciguar los ánimos y terminar guerra de los bandos.
 
Si uno entra por la c/ de Espoz y Mina, a la izquierda de esta casa, una calleja con un encanto especial, desemboca en la Plaza de la Libertad, a mano derecha nos encontramos con la Casa de los Manzano, ahora ocupada por las dependencias del Oager. Es muy fácil verla por las banderas de su fachada propias de un organismo oficial.

 
 


domingo, 25 de noviembre de 2012

Casa de Francisco Solís

 
Situada en la Plaza San Benito nos encontramos con la Casa de Francisco Solís de estilo plateresco, construida en el año 1540 para la familia Solís perteneciente al bando de Santo Tomé. Se encuentra junto a la Casa de los Maldonado Morille y en la misma Plaza donde se encontraba la casa del comunero Pedro Maldonado Pimentel y de la que solo se intuye lo que fue la puerta de la casa noble.


Casa de Francisco Solís
Casa de Francisco Solís
Sólo conserva la portada, que fue restaurada en el XVI, de decoración sencilla destacando en la fachada los escudos de la familia Solís en el centro y otros dos a los lados de la puerta que parecen pertenecer a otras familias nobles emparentados con los Solís como los de Maldonado Zúñiga, Anaya y Monroy. Fue utilizado durante las luchas nobiliarias por lo que llegó a tener torre de defensa.

Casa de Francisco Solís
Detalle
Tiene planta baja, entreplanta y piso principal. En el interior solo tiene interés el salón, iluminado  por las tres ventanas superiores. Se restauró en 1988-1991.

En el s. XVII fue usada como Antigua Cárcel y actualmente Servicio de Publicaciones de la Universidad de Salamanca.

Palacio de los Maldonado de Morille




Situado en la Plaza de San Benito nos encontramos con el Palacio de Maldonado de Morille de estilo plateresco, construida en el año 1530 por Juan de Álava para don Diego Maldonado de Rivas, camarero del arzobispo D. Alonso de Fonseca. Se encuentra junto a la Casa de Francisco Solís y en la misma Plaza donde se encontraba la casa del comunero Pedro Maldonado Pimentel y de la que sólo se intuye lo que fue la puerta de la casa noble.
Palacio de los Maldonado de Morille
Palacio de los Maldonado de Morille
En la fachada del palacio se pueden observar los escudos de la familia Maldonado situado encima de la antigua ventana (hoy balcón), compuesto por cinco flores de lis sostenido por dos ángeles desnudos. A los laterales de la ventana se aprecian los escudos de los linajes de las familias Medrano y Morille, emparentadas con los Maldonado. Por último, encima del escudo de la familia Maldonado se puede apreciar el escudo de los Fonseca, compuesto por cinco estrellas y rodeado por una láurea. Todos los escudos tienen a cada lado un querubín.
Detalle

En 1924 lo adquiere Cruz Roja, que mantiene en el palacio su sede hasta 1987, cuando lo compra la Universidad. En un primer momento era la sede del Secretariado de Actividades Culturales de la Universidad de Salamanca y en la actualidad alberga la sede institucional de la Fundación Cultural Hispano-Brasileña y el Centro de Estudios Brasileños, también de la Universidad. La inauguración se produjo el 22 de noviembre de 2008.

Durante las obras de acondicionamiento para su nuevo uso se descubrió un aljibe cisterna de planta rectangular con una bóveda de medio cañón del Siglo XVI.

viernes, 23 de noviembre de 2012

Casa de Pedro Maldonado Pimentel

Situada en la Plaza de San Benito cerca del Callejón de las Velas nos encontramos con la Casa de Pedro Maldonado Pimentel, se intuye su estilo gótico, construida en el s. XV. Perteneciente  a Pedro Maldonado, un comunero muerto del bando de San Benito. Está en la misma plaza que la Casa de los Maldonado Morille y la Casa de Francisco Solís.

Casona de Pedro Maldonado Pimentel
Casona de Pedro Maldonado Pimentel
En su fachada pueden apreciarse los restos de lo que fue una puerta de entrada (entre las dos farolas) y de los escudos familiares borrados tras la condena y decapitación del comunero. Tras ella, se borró toda huella indigna de Maldonado, su casa, sus escudos… tal como era la costumbre de la época. Asímismo se decidió por concesión real, pasar la propiedad de esta casa, confiscada a la familia, a las monjas franciscanas cuando fundaron su convento en Salamanca, dando lugar a los que hoy conocemos como el Convento de la Madre de Dios, a la que se accede por la c/ Iscar Peyra.

miércoles, 21 de noviembre de 2012

Casa de las muertes - Palacio Fonseca



Situada en la calle bordadores nos encontramos con la Casa de las Muertes al lado de la Casa de los Osorio, de estilo plateresco, construida en el S. XV por Juan de Álava perteneciente al bando de San Benito.
 

Casa de las Muertes
Casa de las Muertes
Se llama así posiblemente porque en la parte inferior de sus ventanas hay talladas en piedra cuatro calaveras que en esta época en Salamanca se las denominaba “muertes”.  O puede que herede el nombre de la calle, pues en 1753, se llamaba calle de la Muertes, porque era un callejón oscuro donde había cantidad de reyertas.

La fachada en piedra franca de Villamayor tiene  ornamentación plateresca. Las puertas y las ventanas están ornamentadas con finas labores y luce en la fachada, medallón y efigie de D. Alonso de Fonseca (unos de los mecenas de Juan de Álava) donde se lee: "el serenísimo Fonseca patriarca Alejandrino" también tiene otros medallones, escudos y relieves, así como las calaveras labradas en las ménsulas.
 
Detalle de la ventana
Detalle de la Ventana
Probablemente porque se pensaba que las calaveras eran de mal agüero y nadie quería comprar el edificio, se convirtieron en esferas y en la restauración que en 1963 se hizo del edificio, por entonces en estado de abandono, éstas se volvieron a labrar (probablemente en tamaño menor que el original).

Existen varias leyendas sobre la casa pero la más conocida la de Don Diego, un hombre arrogante, soldado y poeta que sedujo a muchas y nobles damas de la ciudad con sus galanterías.  Pero el destino quiso que se enamorara de doña Mencía, que acababa de salir de un convento. Una vez casados, doña Mencía empezó a sonreír y a conversar con picardía con unos y otros y cuando su marido andaba guerreando  buscaba el amor en diferentes varones. Siendo públicos en la ciudad sus devaneos, Don Diego averiguó los nombres de tres hombres que tenían amoríos con doña Mencía y decidió matarlos para vengar su honra y luego, en la sangre de sus burladores, ahogaría a Mencía. Doña Mencía lo adivinó todo y cayó de rodillas frente a su marido pidiéndole perdón. Pero Don Diego, que estaba herido de muerte, se lanzó sobre ella apretándole el cuello con sus manos y no soltó el cuello de su esposa. Cuando amaneció, los vecinos subieron a la cámara donde hallaron los cadáveres, Don Diego aún apresando con sus manos el cuello de su mujer y ésta, asfixiada.

También se cree que María la Brava descuartizó a cuatro hermanos Los Lozano para mas señas y allí los enterró.

Otra es una historia de amor entre un Monroy y una Manzano, familias rivales que produjo la muerte de varias personas. Cuando años después se edificó la casa, se hallaron sus cuerpos entre las peñas de los cimientos junto a otros dos sin cabeza, que se decía eran los hermanos Manzano decapitados por doña María la Brava.

Otra leyenda asegura que en el sótano de esta casa una mano criminal dio muerte a la familia de un sacerdote.

También se cuenta, que algunos de los propietarios de la casa han muerto en extrañas circunstancias sin explicar, o fueron asesinados a manos de alguien que nunca se encontró… muchas leyendas para la Casa de la Muertes.
 

Casa de los Osorio - Casa del Regidor Ovalle

 
Situada en la calle Bordadores al lado de la Casa de las Muertes y frente a la escultura de Miguel de Unamuno nos encontramos con la Casa de los Osorio de estilo renacentista, construida en S.XVIII para el regidor Juan Antonio Ovalle Prieto.
 
El nombre de la casa se debe a que ésta pertenecía al regidor Juan Antonio Ovalle Prieto aunque, el edificio no se ha hecho famoso por este motivo sino por haber sido el lugar en el que vivió el escritor Miguel de Unamuno hasta su muerte el 31 de diciembre de 1936.

La casa posee una gran belleza, se trata de un edificio del siglo XVIII construido con la piedra de Villamayor y con una fachada muy sencilla en la que destaca un frontón situado justo encima de la puerta y un enorme escudo que se encuentra más arriba del frontón.

En la fachada se puede ver esta placa en la que se explica que éste lugar fue donde vivió y murió Unamuno.
 
Del corazón en las honduras guardo
tu alma robusta. Cuando yo me muera,
guarda, dorada Salamanca mía,
tú mi recuerdo.
 
Y cuando el sol al acostarse encienda
el oro secular que te recama,
con tu lenguaje de lo eterno heraldo
di tú que he sido.
 

Casa de Santa Teresa - Casa de Juan Ovalle

 
Situada en la calle de los Condes de Crespo Rascón, 19, frente a la Plaza de Santa Teresa,  nos encontramos con la Casa de Juan de Ovalle o Casa Santa Teresa de estilo nobiliario sencillo, construida en el s. XV para la familia Ovalle perteneciente al bando de Santo Tomé.

Es una sencilla casa del siglo XV propiedad de la familia Ovalle, en cuyo interior se conserva la celda en la que vivió Santa Teresa durante su estancia en Salamanca, hoy convertida en capilla.

La presencia de la Santa en Salamanca fue entre 1570 y 1575, cuando se encontraba en la ciudad con el objetivo de fundar el Convento de las Carmelitas Descalzas. En esta casa sólida, sencilla y austera, de rasgos nobiliarios castellanos, destacan los escudos de la familia Ovalle en la fachada. De hecho, se dice que fue aquí donde la santa experimentó un éxtasis en 1571. En el interior hay un fresco y tranquilo patio ajardinado, una capilla, un taller de costura donde las monjas enseñaban el oficio de costurera o cordera a las jóvenes, la celda donde descansó la santa…

Detalle de los escudos
Detalle de los escudos

Se ha mantenido gran parte del mobiliario original y se pueden ver poemas, pinturas, documentos de las propias monjas.

Hoy en día está ocupado por las Siervas de San José Congregación fundada por la Madre Bonifacia Rodríguez Castro y por el Padre Francisco Butinyà, jesuita que se instalaron en la casa en 1881.

domingo, 18 de noviembre de 2012

Palacio de Arias Corvelle

 
Situado en la Plaza de San Boal, entrando por la calle Dámaso Ledesma, nos encontramos con el Palacio de Arias Corvelle o de Arias Corbeille de estilo gótico, construido en el año 1470 para la familia Gómez Gutiérrez de Herrera y su esposa Berenguela González de Corvelle.
Se construye en 1470, conjuntamente con el Palacio de San Boal, del que posteriormente es dividido. Inició su construcción Gómez Gutiérrez de Herrera y su esposa Berenguela González de Corvelle con estructura gótica y siguió Arias Corvelle. Fue reformada en el siglo XVIII y se reconstruyó en 1976.

En su fachada podemos contemplar fragmentos de su fábrica inicial, ya que ha sufrido importantes modificaciones a través de los siglos. Al siglo XVI se debe el magnífico patio de dos plantas, con arcos de medio punto y los medallones más hermosos de la ciudad. Su magnífica escalera recuerda a la de la Universidad de Salamanca, destacando, asimismo, en el edificio los balcones y el esgrafiado exterior.

Fue Escuela de Comercio (1953) y posteriormente facultad de empresariales. Desde 1999 Centro Cultural Hispano-Japonés de la Universidad de Salamanca.

Palacio de San Boal

Situado en la Plaza de San Boal nos encontramos con el Palacio de San Boal de estilo gótico y plateresco, construido en el año 1470 para la familia de Gómez Gutiérrez de Herrera y su esposa Berenguela González de Corvelle.



Palacio de San Boal
Da nombre a la plaza en la que está situado. Se construye en 1470, conjuntamente con el Palacio de Arias Corvelle, con el que formaba un solo palacio, pero fue dividido en dos por el marqués de Almarza en 1740. En esta fecha se hacen los balcones y los detalles de la fachada y su peculiar decoración. Fue reformada en el siglo XVIII y se reconstruyó en 1976.

Un arco de medio punto con arquivolta sirve de acceso al palacio que tiene una escalera plateresca en su interior y un patio renacentista de doble galería, de arcos de medio punto con capiteles decorados por medallones la de abajo y la de arriba con arcos escarzanos y más escudos.

En este Palacio se quedaron las tropas francesas de Napoleón en la Guerra de la Independencia por lo lejos que quedaba de la zona de operaciones del río. Más tarde se quedaría también Wellington.

La Escuela fue creada a finales del siglo XVIII por el gremio salmantino de plateros. Fue comprado al Excmo. Sr. D. Enrique de Aguilera y Gamba, el 7 de noviembre de 1906. Albergó la Escuela de Nobles y Bellas Artes de San Eloy (escuela de Artes y Oficios) y el Conservatorio de Música de Salamanca y desde 1947 pertenece a la Obra Social de Caja Duero. En la actualidad el edificio es la sede de la Fundación Caja Duero, además de la Joven Orquesta de Cámara y el Coro de Niños dependientes de la fundación. En la planta baja está la Sala de Exposiciones San Eloy y en la primera planta la Biblioteca San Eloy, especializada en temas de arte.
 
Cuentan que María Manuela de Moctezuma, Marquesa de Almarza, fue una noble que una mañana de 1768, estando en su Palacio de San Boal sufrió un ataque de catalepsia, enfermedad difícil de diagnosticar en aquella época y parecía que había fallecido. Como la marquesa era muy conocida en la ciudad por su piedad, una multitud se concentró a las puertas de su palacio. Ante esta situación, su marido, el marqués, decidió trasladar el cuerpo de su esposa a la Iglesia de San Boal por un pasadizo subterráneo, para que la multitud no perturbara el traslado.

Durante la noche el cuerpo fue velado por un sacristán de la iglesia, que vio en la mano de la difunta un anillo de gran valor. Llevado por la codicia, decidió apropiarse de él. Cuando fue a cogerlo, la marquesa se incorporó dando un susto de muerte al sacristán, cuyos gritos despertaron a los criados. El rumor fue que la marquesa había resucitado.

Gracias a la codicia del sacristán, la marquesa se salvó de ser enterrada viva y por ello fue recompensado con una pensión y perdonada su avaricia. Además fundó en 1774 una obra pía en la parroquia de San Boal en beneficio de los pobres que perdura en la actualidad.

Años después la marquesa falleció realmente el 6 de junio de 1787, siendo enterrada en la Iglesia de San Boal.

jueves, 15 de noviembre de 2012

Torre el clavero - Palacio de Sotomayor

Torre del Clavero
Torre del Clavero vista desde Pz. Colón
Situada entre las calles del Consuelo, Miñagustín y con vistas a la Plaza de Colón nos encontramos con la Torre del Clavero, construida en la segunda mitad s. XV por Don Francisco de Sotomayor, señor de Baños y Clavero Mayor de la Orden de Alcántara del bando de San Benito.

La Torre del Clavero constituía el elemento castrense del palacio de Don Francisco de Sotomayor que como Clavero Mayor era el encargado de custodiar los clavos de Cristo en procesiones, ofrendas y actos religiosos y, además,  tenía en custodia también las llaves del archivo y pertenencias de la Orden de Alcántara..

Su inconfundible estilo gótico civil tardío Presenta una silueta imponente con aspecto de fortaleza. Tiene base cuadrada pero luego se transforma en un octógono. Tiene unos 28 m. de altura y 6,5 de lado. Se inicia la construcción en mampostería se remata en materiales nobles.
 

Torre del Clavero
La Torre vista desde la c/ Miñagustín
A dos tercios de su altura toma forma octogonal y en cada uno de sus lados destaca un tambor semicilíndrico que va adornado con un escudo de armas. Sus ochavas incluyen garitas, la cornisa está rematada por arquillos y modillones y se pueden ver los escudos de los Sotomayor y Anaya. En el interior tiene cinco pisos que se comunican por estrechas escalerillas de caracol.


Fue declarado Monumento por Decreto de 3 de junio de 1931

La Torre del Clavero pertenece al Ayuntamiento de Salamanca desde 1943, fecha en la cual D. Alfonso Pérez de Guzmán, propietario de la Torre, la cedió de manera gratuita.

Durante años, en las dependencias de la Torre estuvieron los restos de Julián Sánchez "El Charro", hasta su traslado a Ciudad Rodrigo.
 

Vista aérea
Vista aérea de Google maps
Dicen que la torre del Clavero vista desde arriba es el Botón Charro típico de Salamanca. Y aprovechando que hay fotos aéreas por doquier se comprueba que así es.

Tenemos un amigo que cada vez que pasamos por allí se acerca despacio a la torre la agarra por la base (lo que sus brazos abarcan, que es poco a pesar de ser un gran hombre) y dice "enroco". Siempre me ha hecho gracia esta costumbre y cuando paso por allí le recuerdo.





Vista desde la Plaza de Colón (1935)

 

Vista desde la Plaza de Colón


martes, 13 de noviembre de 2012

Casa de las Cuatro Torres - Torre del aire

Situada frente a la Plaza de la Constitución en la esquina de la c/ Bermejeros y extendiéndose por la c/ del Aire hasta la Plaza Santa Eulalia nos encontramos con la Casa de las cuatro Torres, Torre del aire o Palacio de Fermoselle construida en el año 1440 por orden de los Castillo, señores de Santa María del Campo y Fermoselle del bando de Santo Tomé.
 



Torre del Aire
Torre del Aire
La torre del Aire es la única que permanece en pie del antiguo Palacio fortificado de Fermoselle o Palacio de las Cuatro Torres, que fue construido hacia el año 1440. Se trata de la torre de un palacio fortaleza de los que se daba en la época debido a las continuas luchas que existían entre las familias nobiliarias de la ciudad. De ahí el aspecto de solidez y los escasos vanos que posee.

En lo alto hay un tejado que cubre sus almenas, pero es de construcción más reciente. Son muy bellas algunas de las ventanas, con tracerías góticas bajo alfiz y con parteluz, pero lo mejor es que todas son diferentes. Destaca una ventana partida en dos por una columna coronada por filigrana semejante a la de las otras dos situadas más abajo.

Una de las cosas que siempre me ha fascinado de esta Torre son sus ventanas, cada una es diferente. cuadradas, con arcos, con balcón, grandes, pequeñas... es impresionante y muy curioso. No sé el motivo pero me encantaría saberlo.

Detalle de las ventanas
Detalle de algunas ventanas

 
Palacio de Fermoselle
Palacio de Fermoselle (Pz. Santa Eulalia)
En algún momento de su historia se le dio el nombre Palacio de las Cuatro Torres, pero no por razones arquitectónicas, sino por haber pertenecido al barón de las Cuatro Torres. La torre se encuentra en buen estado de conservación.

En el s. XVIII se abrió una fábrica textil donde se llevaba a trabajar a todo aquél que no pudiera demostrar tener otro trabajo tratando de imitar al mundo anglosajón, donde no trabajar era considerado como una falta.
 
Más tarde sirvió como lugar de caridad y posteriormente perteneció a la Orden de los Hijos de María Inmaculada. Hoy en día es residencia femenina para estudiantes.

domingo, 11 de noviembre de 2012

Palacio de Orellana

Palacio de Orellana - Palacio del Marqués de la Conquista - Palacio del Marqués de Albaida - Palacio Marqués de Liseda

Situado en la c/ de San Pablo esquina a c/ de Jesús nos encontramos con Palacio de Orellana de estilo clasicista, con influencias manieristas, estilo intermedio entre el final del renacimiento y comienzos del barroco, construida en el año 1576 por el maestro cántabro Juan Ribero de Rada para el Canónigo don Francisco Pereira de Anaya perteneciente al bando de San Benito.
Palacio de Orellana
Palacio de Orellana

Su fachada, frente a la Plaza de Colón, presenta dos cuerpos separados por simples cornisas, rematado en galería adintelada a base de pilares con zapatas, destacando la alternancia de frontones rectos y curvos que decoran los vanos del segundo piso. En uno de los extremos de la fachada se alza un torreón  defensivo que repite en su remate la galería del cuerpo principal con el escudo de los Anaya.

En su interior, tiene un patio irregular con forma de L con dos galerías en cada lado, la inferior con arcos de medio punto y adintelada la superior, con óculos en las enjutas, es decir, que donde se juntan los arcos de las columnas, donde normalmente se ponen los medallones, hay un agujero circular, cosa muy típica en el arte italiano de la época pero poco corriente en nuestra ciudad.

Uno de los elementos más originales y destacados del inmueble es la escalera de comunicación de la galería baja y alta; situada en uno de los extremos de la fachada y detrás de la torre. La caja, casi un cuadrado, se abre al patio mediante un amplísimo vano adintelado.

En el siglo XIX se amplió el palacio en el solar que dejó el derribo de la Iglesia de San Adrián.
Fue declarado BIC con categoría de Monumento el 16 de marzo de 2000.

Torre de los Anaya o Torre de Abrantes

Situada en la c/ de San Pablo esquina c/ de Jesús nos encontramos con la Torre de Abrantes perteneciente a la antigua casa señorial de estilo gótico civil, construida en el s XV para la familia Anaya-Bazán.
 
Ventana ajimezada
Ventana original
Destaca la ventana ajimezada (que tiene el vano dividido en su centro por una columnilla formando dos huecos gemelos rematados por sendos arcos) que parece ser original del edificio, Se puede ver un escudo con la banda de los Anaya y otro de la casa de los Bazán presentes también en el palacio de Orellana y tiene un patio de tres lados. También es llamada Torre de Abrantes por una confusión, ya que ésta se encontraba justo enfrente.
 
El exterior tiene un carácter militar robusto con torre defensiva y se entra por un arco semicircular. Tiene un patio al que se accede por un zaguán techado con armadura de madera, de planta cuadrada imperfecta con columnas poligonales.

Al llegar el emperador Carlos I a España se inició la guerra de las Comunidades de Castilla mediante el levantamiento armado de los denominados comuneros, acaecido en la Corona de Castilla desde el año 1520 hasta 1522. Tras la victoria de Carlos I se produjo el desmochamiento de la torre con el objeto de evitar males mayores.
Torre de los Anaya
Torre de los Anaya
A comienzos del s. XX era propiedad del famoso ganadero Juan Sánchez, llegó a los años 60 con sólo la planta baja, un piso y desván. En el año 1974 se decidió dar a la torre una cota mayor, se emplearon materiales modernos. Se hizo una planta superior diáfana de cristal y carpintería metálica que no fue del gusto popular que hizo intervenir a la Dirección General de Bellas Artes, lo que causó que en 1976 los nuevos materiales fueran reemplazados de manera más ortodoxa usando piedra de arenisca y un tejado de cuatro aguas  tal como se puede observar en la actualidad. Entre 1987 y 1992 se hizo otra reforma importante, pero esta vez rehabilitando el interior.

Durante años fue la sede del Instituto de Estudios de Iberoamérica y Portugal de la Universidad de Salamanca, se instaló igualmente el Museo Oriental de Salamanca y actualmente está el Museo Internacional del Estudiante, siendo hoy día propiedad del Ayuntamiento y de la Diputación de Salamanca.

jueves, 8 de noviembre de 2012

Casa de Dorado Montero

Situada en la calle del Arroyo de Santo Domingo nos encontramos con la Casa de Dorado Montero, construida en s. XX para este jurista.
 
Casa de Dorado Montero
Casa de Dorado Montero
Pedro Dorado Montero (1861-1919) fue Catedrático de Derecho en la Universidad de Salamanca. Nació en el seno de una familia humilde. Inició sus estudios en Béjar, logró una beca del Colegio de San Bartolomé para estudiar Derecho y Filosofía y Letras en la Universidad de Salamanca. Una vez concluidas en 1883, logró el grado de doctor en 1895 en Madrid.

Fue jurista, penalista y criminalista. Introdujo el positivismo jurídico en España, frente al iusnaturalismo tradicional, es considerado un adelantado de la Criminología.

Su familia donó la casa, su biblioteca y archivo epistolar a la Universidad,  Ha sido recientemente restaurada y se usa como Centro de Investigaciones Lingüísticas de la Universidad de Salamanca (CILUS).

Casa de Galera

Situada en la calle Sancti Spiritus nos encontrábamos con la Casa de Galera, construida en el año 1757 por el Concejo y el Obispado.

Se usó como cárcel y se destruyó en la guerra de la Independencia sin dejar restos significativos. Se reconstruyó en el s. XIX.

Casa Lis - Museo Art Nouveau y Art Déco

Situada en la calle del Expolio nos encontramos con la Casa Lis de estilo modernista, construida en el año 1905 por el arquitecto Joaquín de Vargas para D. Miguel de Lis.
 
No me esforzaré en mejorar el texto que la propia página del Museo de la Casa Lis tiene, porque me parece inmejorable, por ello, y esperando que nadie se moleste, copio el texto que allí aparece y cojo algunas  fotos preciosas que ofrecen en su página, otras las hicimos paseando por allí.
 
Fachada Casa Lis
Fachada Sur de la Casa Lis
Tiene dos bellas fachadas de gran riqueza decorativa. La que da a la catedral es una muestra de modernismo, mientras la del río es una galería de vidrieras y metal de gran belleza. En la actualidad es el Museo de Art Nouveau y Art Decó, y cuenta con una de las colecciones más importantes del mundo en muñecas, adornos y joyas de finales del siglo XIX y principios del XX.
 
La Casa Lis es un palacete urbano enclavado sobre la antigua muralla de la ciudad mandado construir por D. Miguel de Lis (1855-1909). El encargado de llevar a cabo este proyecto fue Joaquín de Vargas y Aguirre (1857- 1935), natural de Jerez de la Frontera, que desembarcó en Salamanca para ocupar la plaza de arquitecto provincial. Don Miguel de Lis era propietario de una fábrica de curtidos heredada de su padre y que adaptó a los nuevos sistemas de producción. Este próspero negocio le facilitó una desahogada posición económica, de modo que D. Miguel es, en la época en que construye su nuevo palacio urbano, uno de los cien mayores contribuyentes de Salamanca. Definido como una persona hábil para los negocios y trabajador infatigable, su carácter “moderno” se puede apreciar en la concepción de su nueva vivienda.
 


Las características del solar sobre el que se edificó la Casa Lis (irregular, enclavado sobre una muralla y con un fuerte desnivel en su lado sur) hubiesen podido ser limitaciones en un primer momento, si bien son resueltas por Joaquín de Vargas de forma magistral. Vargas organiza toda la vivienda en torno a un patio interior que sirve para distribuir las estancias y diseña una fachada construida con hierro y vidrio siguiendo los preceptos de la arquitectura industrial. Para salvar el desnivel existente hasta llegar al actual paseo del Rector Esperabé, idea una escalera que permite crear unas terrazas ajardinadas y una gruta cubierta de rocalla que aligera el conjunto. El resultado es uno de los pocos ejemplos de arquitectura industrial empleada para uso residencial, único por su espectacularidad y por la audacia arquitectónica con que Vargas fue capaz de resolver los condicionantes del proyecto.
 


Fachada norte del Museo
Fachada norte de la Casa Lis
Pero la Casa Lis reserva una sorpresa más: su fachada norte es uno de los pocos ejemplos de arquitectura modernista que podemos encontrar en Salamanca. Construida en piedra y ladrillo, destaca su puerta de acceso y el movimiento orgánico de las verjas de hierro de una deliciosa delicadeza Art Nouveau. La construcción de la Casa Lis debió de ser rápida, en 1905 se reconstruye la fachada norte y en 1906 se inaugura la vivienda. En el interior, la casa contaba con habitaciones para el verano y para el invierno, las primeras en la planta baja y las segundas, en el principal. Entre otras dependencias contaba con despacho, comedores, oratorio, sala de baños con agua fría y caliente, varios salones e invernadero. La vivienda se iluminaba con luz eléctrica y la decoración era de gusto modernista con vidrieras artísticas en la galería del patio, las puertas y la claraboya de la escalera principal.


Maravillas del Museo
Algunas de las maravillas del Museo de la Casa Lis

La casa-palacio cambió de propietarios en 1917, cuando D. Enrique Esperabé de Arteaga (1869-1966), futuro rector de la Universidad de Salamanca, se muda aquí junto a su familia. Después, la Casa Lis fue habitada por diversos inquilinos hasta que en los años setenta, cerrada y sin uso, comienza un periodo de decadencia y degradación. Así, aunque la Casa Lis vivió una época de esplendor, también fue víctima de un periodo de abandono que a punto estuvo de hacerla desaparecer. En 1981, el Ayuntamiento de Salamanca, consciente del valor del inmueble, inició un expediente de expropiación que logró salvarla de la ruina.
 
 

Actualmente el edificio es la sede del Museo Art Nouveau y Art Déco y en sus salones y dependencias se exhibe una parte de los fondos donados por D. Manuel Ramos Andrade (1944-1998), anticuario y coleccionista que vio cómo en 1995 la Casa Lis, con un recuperado esplendor, abría de nuevo sus puertas, ésta vez para exponer sus colecciones únicas en España. En la actualidad, una gran vidriera emplomada, realizada por el taller Villaplana siguiendo diseños de D. Manuel Ramos Andrade, cubre el patio central. Las claraboyas y cerramientos elaborados en el mismo taller han recuperado las vidrieras artísticas que ya engalanaban la vivienda de D. Miguel de Lis en 1906 y la fachada sur, de un delicioso cromatismo, se ha convertido en una de las imágenes más representativas de Salamanca.

 
 

miércoles, 7 de noviembre de 2012

Casa de la Mancebía

Curiosa esta casa de la que no queda nada, sólo los escritos. La Casa de la Mancebía se supone que estaba situada cerca de la Vaguada de la Palma, en el Arrabal  donde se hace la feria de ganado, en el conocido como “Campo de Mancebía”.

El príncipe Juan, hijo de Isabel la Católica, vivió en Salamanca una temporada y viendo la cantidad de estudiantes y prostitutas que había en la ciudad concedió un privilegio a García de Albarrategui. En 1497 el Concejo cedió terrenos y se hizo un burdel o casa de mancebía de 40 habitaciones.
 
Ilustración de La Celestina 
El oficio de prostitución estaba prohibido a mulatas, casadas y a toda mujer cuyo padre viviera en Salamanca. Para que nadie las confundiera, llevaban encima de las sayas una mantilla amarilla corta y cubrían la cabeza con un paño pardo, de ahí la expresión “irse de picos pardos”.

Cierto es que no todas estaban en estas casas, o no les interesaba, no podían acatar las normas, o simplemente no cumplían los requisitos. Estas mujeres entonces, lo que hacían era pintar sus casas de colores muy vivos y ponían ramos de flores en sus puertas motivo por el cual se las conoce como rameras.

Había un padre de mancebía, Padre putas o Padre Lucas, lo que hoy día se conoce como chulo o proxeneta con la diferencia de que a este hombre lo nombraban las mancebas y era aprobado por el concejo. Las putas le obedecían bajo pena de expulsión. Las mujeres gozaban de buena salud, más o menos, ya que el médico las visitaba 1 vez por semana a la casa de Mancebía.

Se regían por las órdenes del Concejo, el horario era de vísperas a maitines, también en días de fiesta, cuaresma, 4 témporas y vigilias no están estas mujeres ganando según decía Felipe II en 1570.

Cuando llegaba la cuaresma, el padre putas para evitar la ocasión  las llevaba  a Tejares cruzando el río. El lunes de Aguas cruzaban el río en barcas enramadas y los mozos las esperaban para celebrar una gran merienda.

Celebrando el Lunes de Aguas
Ese día de vuelta que coincide con un lunes ocho días después del Domingo de Resurreción, las putas no podían pasar el puente porque estaban en pecado mortal y no sería muy cristiano que se cruzaran con la gente decente que acababa de santificarse en Semana Santa. Mientras el puterío iba a purificarse a la catedral (confesión y comunión)  los vecinos, estudiantes y curiosos se inflaban a vino y hornazo en el río. De aquí viene la curiosa tradicion salmantina del "Lunes de Aguas"
 
En 1618 se dio una Real Orden por la que se prohibió la Casa de Mancebía y demás prostíbulos, pero las mujeres siguieron trabajando, sin un padre putas democrático, sin control sanitario, motivo por el cual las mujeres empezaron a estar por su cuenta bajo la protección de chulos que las explotaban y maltrataban. La situación fue tan terrible para estas mujeres que se creó la Casa de Aprobación y tiempo más tarde se harían cargo de ella las Reverendas Madres Adoratrices.
 

lunes, 5 de noviembre de 2012

Casa de la Concordia

Situada en la c/ San Pablo nos encontramos con la Casa de la Concordia  que tiene más valor anecdótico que histórico. Se la conoció como la Casa de las Batallas y posteriormente como la Casa de la Concordia.



Arco de la Casa de la Concordia
Arco de la Casa de la Concordia
Esta casa fue totalmente rehecha en 1873 y de la época de su fundación sólo conservaba la puerta adovelada y una inscripción sobre el arco.
«Ira odium generat concordia nutrit amoren»
« La ira genera odio, mientras la concordia se nutre del amor»
En la fachada original había dos puertas. Una de medio punto con la Inscripción y otra a su izquierda con un arco adintelado de estilo gótico y el escudo de armas de la familia, que en la remodelación se integraron en el interior del edificio donde se conservan.

Actualmente es un moderno edificio que alberga un Colegio Universitario de Jesuitinas.

Se dice que San Juan de Sahagún consiguió apaciguar a los bandos de familias nobles que durante cuarenta años lucharon en Salamanca, con muchas muertes por ambas partes.

San Juan de Sahagún habló con ellos, les expuso la forma de vivir, la poca importancia de los bienes terrenales, la importancia del alma y del amor, a lo que los discrepantes se acongojaron viendo su mirada limpia y serena y arrepentidas aquellas familias entre los que contaban los Maldonados, Gil, González, Anayas, Acebedos, Nietos, Arias, Lozano, y otras relevantes firmaron un documento público, que avalaba la paz entre todos dando fin a las disputas de los bandos. El acuerdo se hizo en una casa de la c/ de San Pablo que se llamó desde entonces Casa de la Concordia. Esto ocurrió en 1479 poniendo fin a años de enfrentamientos.